Prólogo : Desde hace miles de años el ser humano a venerado, por excelencia, el cielo. De él partía las bases de las creencias de que, por encima de todo, existía algo superior a nosotros. Indistintamente de que sea asombro por lo desconocido o sofisticado, mitología, religiones o todo tipo de creencias diferentes a lo anteriormente mencionado, nuestro cielo ( El Universo ) y su contenido ( sea cual sea ), ha suscitado respeto, veneración, admiración o cualquier otra objeción al respecto. ¡ Para nadie le ha quedado indiferente !. El siguiente capítulo hará uso de la objetividad imparcial, no de la antiguedad ( existen muchos datos en el aire ) sino de la actualidad. Se tratará de que, objetivamente, los datos existentes aporten información empírica tal cual. Una vez aclarado el tema en que consiste el siguiente capítulo, se tratará de dejar en manos del lector la reflexión personal y respetuosa que le suscite el tema que a continuación se detalla.
¡ Cuando sepamos abrir los ojos, veremos la verdad !